Primera carta a mi sangre - canción

Tito Segura

Ya, se moría la tarde
y sobre los ventanales
diez, cien, tal vez
mil gotas de lluvia
Caen y mueren aquí
sobre mi corazón, solitario
Ya, no se cuanto he crecido
y del tiempo que ha pasado
y hoy supe de todo y nada
cuando el ser de mi ser
me ha preguntado, Papá..

Haz tenido alguna vez un buen amigo,
que te ha prestado como a mi su barrilete,
lo remontamos con el aire a las estrellas,
y a media tarde se mezcló con mis juguetes.

Y con el tiempo que nos junta o nos separa,
lo veo aquí siempre en su misma transparencia,
comparte juegos y una vida de muchacho,
y somos dos de una feliz adolescencia.

Cuando lea esta carta y quizás cuando la negra boca de la muerte ya me haya llevado
recién entonces comprenderá esta y muchas otras verdades eternas
Amigo, amigo es una palabra muy fácil de decir, pero tan difícil de encontrar.
Por eso y para conseguirlo no mienta nunca y puede que no le mientan.
Bríndese y así, así se le brindarán y por sobre todo sea siempre sincero con usted mismo.
Y cuando el azar de la vida lo enfrente a una mujer,
piense en su madre que también es mujer y respétela como la respeta a ella.
Quienes piensen así pueden ser sus amigos y de los buenos
como el que hoy lo enorgullece, de lo contrario los otros no hacen falta a su lado.
Si así no lo fuera cárguelo a la vida o al destino y aguante y siga solo.
Que muchas veces o siempre, más vale estar solo que mal acompañado.
Por la sinceridad de su pregunta y el candor de su adolescencia pura,
ya se ha ganado uno más y para siempre mientras me quede un hilo de vida.
Cuente conmigo que yo cuento con usted y guarde esta carta entre esas otras cosas
que mañana formarán su historia.
Y cuando su misma sangre pero algo más pequeña le haga la misma pregunta que usted me ha hecho a mi,
acuérdese de estas cuatro letras que hoy, que hoy le ha dejado su padre.

Ya, se moría la tarde
y sobre los ventanales
diez, cien, tal vez
mil gotas de lluvia
Caen y besan mi ser
porque mi corazón
ya no está solo.