EN EL DESTIERRO
Estilo cuyano
Letra y Música de
Buenaventura Luna

Yo fui caudillo en la sierra
y fui matrero en el llano;
todo el dolor de mi tierra
está en mi vida, paisano.
Me anduvo haciendo baquiano
en la llanura y el cerro
el canto de este cencerro
que mis tristezas ahoga,
¡yo fui vidala en Quiroga
y media cifra con Fierro!

Quién sepa historia pasada
sabrá que dende el comienzo,
yo madrugué en San Lorenzo
con la primer puñalada;
que allá por Cancha Rayada
anduve a los trompezones
y que aprendí mis canciones
siguiéndolo a San Martín,
las dianas de su clarín
y el tronar de sus cañones.

No tengo rancho en la pampa
ni tengo quincho en el cerro,
se desvanece mi estampa
y el tañir de aquel cencerro.
Tiré mi flete al destierro
llegando ya a la vejez,
me pasa, yo bien lo sé,
lo mismo que a Fierro y Santos,
no comprendieron mis cantos
los que vinieron después.

Fernando Portal me presentó a ese poeta sanjuanino y mítico personaje que fue don Buenaventura Luna, cuyo verdadero nombre era Eusebio de Jesús Dojorti. Había nacido en Huaco, el 19 de enero de 1906. Lo conocí en las reuniones que hacían mis padres en casa de mis abuelos pero en aquel tiempo yo era muy chico. Lo llegué a tratar mucho más —no tanto como yo hubiese querido—, en su departamento de la calle San José, entre Hipólito Irigoyen y Alsina.
Era un conversador cautivante, de una cultura que deslumbraba. Una tarde que estábamos tomando un café con Portal en el bar “La Moncloa” de Avenida de Mayo y Luis Sáenz Peña, al entregarme los versos de este estilo me dijo sentencioso: “Quiero dedicarle este estilo, Tonito. Usted pinta lindo. No se nos manque”. Sentí mucho su temprana muerte, ocurrida en Buenos Aires el 29 de julio de 1955.
Es oportuno señalar que el Dr. Carlos Gómez Centurión, cuando era senador por San Juan —también fue dos veces gobernador de su provincia, diputado nacional, embajador en México y Portugal— convocó a amigos, estudiosos e investigadores de la obra de Buenaventura Luna para reunir sus poemas y logró que el Senado de la Nación editara una Antología completa de este huaqueño ilustre.

Tonito Rodríguez Villar.

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