Cancionero folklorico y Fe catolica

A modo de prefacio
Cuando se estableció el programa para la ciencia folklórica, en el año mil ochocientos setenta y ocho, se la definió básicamente como la ciencia de las supervivencias, la ciencia de los acontecimientos antiguos en tiempos modernos.
Entre esas antigüedades que se estudian dentro del Folklore, encontramos las coplas que se transmitieron y transmiten de generación en generación, permitiendo la normal mutación y difusión del hecho folklórico.
Fue Juan Alfonso Carrizo, docente e investigador nacido el 15 de febrero de 1885 en San Antonio de Piedra Blanca - hoy Fray Mamerto Esquiú- provincia de Catamarca, quien realizó la mayor recopilación de coplas de la lengua castellana. Esas coplas, según propias palabras de Carrizo, fueron una decantación del romancero del Siglo de Oro español, entre los siglos XVI y XVII.
Las coplas recopiladas transportaban un nutrido bagaje católico y no es un dato azaroso, ya que los primeros criollos se criaron en la doctrina de los sacerdotes franciscanos, dominicos, mercedarios, y jesuitas, siendo todos ellos los que evangelizaron la mayor parte del nuevo continente a partir del siglo XVI.
El proceso de folklorización es lento y en constante mutación, es transmisible, y funcional (porque tiene una utilidad concreta), por ello se deduce que fueron los primeros criollos los que forjaron, de a poco, los sucesos folklóricos que se comenzaron a estudiar en la segunda mitad del siglo XIX.

Las coplas populares y las proyecciones difundiendo la Fe Católica
Vale diferenciar técnicamente la copla popular de la proyección folklórica
En las coplas populares las creaciones provienen del pueblo, son anónimas, tal como lo sugiere el texto del emblema del Folklore Argentino “lo que el pueblo, piensa, siente, imagina y obra”, son creaciones que cumplen las características del hecho folklórico en sí. Por otra parte, la proyección folklórica es el acto en el cual el objeto del Folklore se realiza fuera de su ámbito natural, el creador es conocido y responde más que nada a una manifestación espiritual individual que a una necesidad colectiva.
En el ámbito de las coplas y cantares populares, fueron Juan Alfonso Carrizo, Orestes Di Lullo y Juan Draghi Lucero, entre otros, los que tomaron las trovas y las clasificaron como históricas, sentenciosas, de pena, alegrías, despedidas, etc., y enumeraron también las de carácter religioso. Numerosos son los ejemplos religiosos de índole colectiva, pero es sumamente gratificante saber que en el cancionero actual también existe, y de muy buena manera, un acercamiento y una devoción hacia la fe católica.

El Santo Patrono del Folklore Argentino
Un argumento válido para observar la íntima relación del Folklore Argentino con la Fe Católica es el hecho de que su patrono es San Francisco Solano.
Nacido en España, el 10 de marzo de 1549, se lo llamó el Taumaturgo del Nuevo Mundo, por la cantidad de milagros realizados.
Partió de Sevilla a América en 1589. San Francisco recorrió por veinte años el continente americano, desde Lima (Perú), hasta Tucumán (Argentina), luego el Chaco Paraguayo, Uruguay, Río de la Plata, Santa Fe y Córdoba. Tenía una milagrosa habilidad para la palabra y la música como así también para entender las diversas lenguas de los nativos; en varias oportunidades supo apaciguar a tribus tremendamente belicosas, como así también poner calma a animales feroces.
En 1604 vuelve a Lima donde pasaría sus últimos momentos. El 14 de junio de 1610 se reunieron varios pájaros en su ventana y sonaron misteriosamente las campanas de la iglesia de Loreto... San Francisco moría el día de San Buenaventura (teología en la que se inspiró, que consideraba a la creación como una gran obra de arte que refleja al Creador. Así, salía al jardín o al campo a “buscar argumentos” para sus sermones en el canto de los pájaros, el colorido y perfume de las flores y todo lo bello que veía y sentía).
Su proceso de canonización se abrió a los 15 días y lo canonizaron el 27 de diciembre de 1726.
La fecha del santo franciscano se conmemora el 24 de julio por ser la fecha en que comenzó a investigarse su vida y vasta obra.

Homenajes
Aunque el criollo no cumpla acabadamente los oficios religiosos, en cada celebración – sea Pascua, Navidad, Bautismos, Casamientos o alguna fiesta patronal – su concurrencia es vivida de forma intensa y pasional.
Cada sensación espiritual fue plasmándose en sus canciones.
El respeto por la religión y la necesidad de vivirla como una brújula infalible, lleva al creador de las coplas a homenajear, por si, o por otros, las diversas manifestaciones católicas que le prodigaron las bendiciones de las que ha sido fruto.

Pedidos y ruegos
Se dice que el último pensamiento del hombre, sea o no creyente, va destinado a Dios. Los cristianos buscamos en ese supremo momento el amparo de Dios Uno y Trino, casi siempre por medio de la Virgen consoladora, abogada y medianera. Los que no profesan la Fe católica posiblemente invocarán a Alá o Brahmán y en algunos casos más exóticos, a la Madre Naturaleza, alguna Cosmogonía o hasta al Universo.
Nuestro paisano suele recurrir constantemente a su Padre Celestial, muchas veces dirigido a través de la Virgen María o al Santo de su familia. Es una costumbre de siglos, y una realidad plena y convencidamente aceptada. No existe la duda de si la gracia vendrá de cielo… es una realidad, algo intrínseco, irrefutable; es por ello que el pedido y el ruego siempre va dirigido en forma directa o indirecta a Tata Dios.

Reconocimientos y agradecimientos
Así como el paisano suele rogar, también su reconocimiento es sincero y sentido.
Cada nacimiento, cada reproducción de la hacienda, las buenas cosechas, los días templados, las buenas lluvias, todo es “gracias al Señor”, el alma del criollo es ancha, y en esa extensión siempre hay lugar para agradecer... profunda y genuinamente

Diversas manifestaciones
Los investigadores del Folklore recorrieron ampliamente el territorio nacional: Patagonia, Cuyo, Litoral, etc… pero siempre el estudio más exhaustivo se realizó en el Noroeste Argentino.
Decía el Dr. Ernesto Padilla – llamado el Mecenas del Folklore, por su constante apoyo a los emprendimientos de los estudios nativistas de la primera mitad del siglo XX – que la mayor concentración de comunidades Folk (estratos socio-culturales que producen principalmente el hecho folklórico) estaban en el Norte Argentino, aunque él no tenía conocimiento de la zona de Cuyo, específicamente.
En los hogares de la campaña de nuestro Norte, aún hoy en día, es muy común encontrar las ermitas y santuarios destinados a la veneración… Santa Rita, San Isidro, San José, la Virgen María, Sagrado Corazón. Cada una de estas imágenes es trasladada entre las mismas casas, atravesando ríos, desiertos, cerros y quebradas para las distintas festividades.
Sin duda todas estas manifestaciones inspiran a los músicos y poetas a representar su profunda devoción.

La Navidad y Los Reyes Magos
En las zonas rurales la llegada de fin de año y con ella el festejo del nacimiento del Niño Dios es motivo de recogimiento y algarabía en extraña conjunción.
La globalización hizo que las buenas y viejas tradiciones sufrieran un duro golpe a manos de costumbres foráneas, tal el conocido Papá Noel (también de origen católico). A medida que uno se aleja de las grandes ciudades aquellos festejos se van desvaneciendo dando lugar a los pesebres, las danzas de las cintas, las zapatillas en las ventanas, el pasto y el agua para los camellos, la idea del buey y el burro cobijando al Niño, las reuniones familiares y la cálida pialada de recuerdos.
En algunas casas esta fiesta es motivo de felicidad, en otras de dolor, pero la imagen de la Cuna Celestial siempre está presente.

La Pasión
Es sin duda la celebración más importante de la cristiandad, el triunfo sobre la muerte y el pecado.
En casi todas las poblaciones, en especial en los valles, cerros y altipampa existen celebraciones de singulares características. Así tenemos en Tilcara (Jujuy), en donde los vecinos de la localidad realizan para estas fechas ermitas construidas con frutos naturales: flores, semillas o ramas; en Cachi (Salta) se hacen las estaciones subiendo una loma hasta llegar al cementerio que se encuentra en la cumbre; en la zona de San José (Catamarca), los misachicos realizan las estaciones desde altos cerros hasta llegar a la capilla del pueblo, en Purmamarca (Jujuy) se representa la pasión con vestidos de época y el constante acompañamiento de los sikuris (ejecutantes de sikus).
Para esta época, especialmente, es común ver los antiguos rebozos en las cabezas de las señoras, la mejor vestimenta en los hombres y un absoluto respeto por la celebración

A modo de epílogo
Mucho es lo que se ha escrito en verso o en prosa, y en todas las especies coreográficas, relacionado con la fe católica, ningún espacio sería suficiente para describir o comentar los actos de adoración, pedidos de ayuda, agradecimientos, muestras de patriotismo y promesas que le fueron dedicados a nuestra religión en el cancionero.
Gratifica espiritualmente saber que se le sigue cantando al amor a Dios, a la madre y al prójimo, a la lealtad, al extrañado terruño y al calor de hogar, porque resaltan valores y dan luz al espíritu, es el tipo de trova que sirve de asidero cuando el alma está agobiada y la luz de esperanza apenas se atisba.

A LA VIRGEN MARÍA
A don Polo Giménez (del Valle)
A la Virgen de Marilauquen
Bendita sea tu pureza (chamamé)
Canción a la Virgen de la Ermita de La Chacra
Catamarca es lo mejor (del Valle)
Coplas al Norte
Corazones partidos
Chacarera eres recuerdo
El jardín amado
El lamento de la urpilita (leyenda)
El Marinero – Cueca
El violín de Tatacú (de Loreto)
Está lloviendo en Luján
Gatito silipiquero
Himno a Tucumán
La casita (de Guadalupe)
La patria vive
Loretano soy (de Loreto)
Mi patrona y generala - Cueca
Peregrinos de la Virgen Correntina (Itatí)
Vaya pa que sepa (del Valle)
Virgen de la Carrodilla
Virgen India
Virgencita de la Peña
Virgencita de Pachaco
Zamba de mi Patria Chica (de la Merced)
Zamba para mi madre (Anunciación)

A NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO
A Catamarca
Alto Paraná
Cristo del río
Espejo de amor
Himno a la amistad
Los sesenta granaderos
Mi abuela Vital Pedraza
Milonga
Nochebuena
Oración del remanso
Que hermoso sueño soñé
Salta te canto
Sin flojedera
Soy de Salta
A LA NAVIDAD Y NIÑO DIOS
El burrito de Belén
En un burrito orejón
Estrella de Belén
Ha llegao la Nochebuena Huachitorito (D.R.)
Jesús carpintero
La banda del Niño
Navidad quiero campanas
Niño rhupa
Pastorcito de Belén
Villancicos
Zamba por El
A LOS SANTOS Y PATRONOS
Escondido de la alabanza
La miel de quella (San Francisco Solano)
Villancico de San Francisco Solano

Trabajo realizado por Eduardo José Ocaranza Zavalía.
Director-Editor de la revista Folklore del Norte.com.ar
Director del sitio WWW.FOLKLOREDELNORTE.COM.AR
Profesor Superior de Danzas Folklóricas

Cancionero folklórico y Fe católica