QUERIDO ALFREDO

Teresa Parodi

Usted preguntará, querido alfredo
Si aún nuestras canciones son cantables
En esta soledad de canto incierto
En esta soledad de soledades
Compañero
La vida nos sostiene en el intento
De abrir el corazón al resto de pasión
Que sigue sublevándonos plurales


Que cuesta mucho la ilusión
Contraponiéndose al dolor
Imperdonable

Que sin embargo sigue allí
La gente nuestra sigue allí
Herida el alma pero allí
Inquebrantable

Si usted pudiera vernos combatiendo
La diaria humillación a pecho abierto
A pura convicción a contrafuego
De pie sobre las ruinas resistiendo
Compañero
La américa desnuda se debate
Con siglos de furor poniendo el corazón
El viejo corazón en el combate


Que en esta absurda soledad
Usted empuja desde el pie
Inolvidable

Que su guitarra sigue aquí
Golpeando negra sigue aquí
Acompañándonos aquí
Inquebrantable

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